Cannabis sativa sativa

Las variedades sativa florecen entre varias semanas y meses después que las índica.

Si bien son buenas productoras al aire libre y suelen llegar a medir 4'5 m o más, las variedades sativa puras alcanzan una altura bastante alta a un período de tiempo bastante corto -algunas unos tres metros en tres meses poco prácticas para interior.

Las variedades de México, Colombia, Tailandia y Jamaica pueden resaltar por su potencia gracias a una proporción elevada de THC (Tetrahidrocannabinol) en relación con el CBD,[1]​[2]​ lo cual produce un efecto «veloz», energético y elevador.

Las variedades sativa de África central, incluyendo la potente congoleña, crecen de manera similar a las colombianas con una estatura que suele superar los 4'5 m, ramas largas y cogollos poco apretados.

Las sativa tailandesas, vietnamitas, camboyanas y laosianas tienden a producir adultos hermafroditas.

Grandes ramas y alta estatura son dos de las características del Cannabis sativa sativa .