Candidato político

La palabra latina candidatus, que significa persona vestida de blanco, llegó a convertirse en sinónimo de toda aquella persona que busca alguna dignidad, honor o cargo.En algunos casos, los órganos nacionales son los que primero precalifican a los candidatos y luego convocan a las bases del partido convirtiendo usando este mecanismo para la legitimación de los acuerdos entre las élites.Aparte del uso anteriormente descrito, pueden servir para resolver conflictos sobre liderazgo dentro de un partido.En muchos países, este mecanismo está siendo reemplazo por las elecciones internas cerradas.[2]​ Este mecanismo funciona cuando el presidente elige al candidato sucesor para su partido.