El canal de retorno permite la comunicación entre el receptor y el proveedor del servicio interactivo.
Un canal de retorno debería estar siempre disponible.
La Televisión Digital Terrestre (TDT) facilita el uso de aplicaciones interactivas, que son aquellas en las que el usuario envía datos al proveedor del servicio.
Este tipo de aplicaciones necesita de una conexión a Internet por parte del decodificador para poder enviar los datos.
Esto es posible gracias al canal de retorno, que puede ser la línea telefónica, ADSL o el Cable Modem de los operadores de cable siempre que se tenga acceso a estos servicios.