Contó con la participación de 8 equipos y el campeón nacional fue Deportivo Municipal.
Tenía un plantel sostenido por buenas figuras, que se crecían en las jornadas gravitantes, pero aún le faltaba el gran ídolo.
Ese puesto tuvo nombre recién desde esa temporada, la primera en la que Roberto Drago Burga vistió la franja edil, debutando con goleada y con un título que fue el primer paso hacia su consagración como uno de los grandes del fútbol nacional.
El torneo se jugó a dos ruedas y se otorgaba tres puntos por partido ganado, dos puntos por partido empatado y un punto por partido perdido.
Todos los partidos se jugaron en el Antiguo Estadio Nacional de Lima y en el Estadio Modelo de Bellavista del Callao.