La Convención Nacional Demócrata de 1932 nominó unánimemente al presidente Andrew Jackson para un segundo mandato, pero reemplazó al vicepresidente, John C. Calhoun, del Partido Nulificador (que ya estaba cumpliendo su segundo mandato), por el demócrata Martin Van Buren.
Los antimasónicos, que constituyeron el primer tercer partido importante en la historia de los Estados Unidos, nominaron a William Wirt.
Wirt quedó en último lugar con el 7.78% y los 7 electores del estado de Vermont, único donde logró imponerse.
Van Buren instigó el procedimiento como un medio para remover a los partidarios de Calhoun del Gabinete.
Jackson ya había sido nominado por varias legislaturas estatales, siguiendo el patrón de 1824 y 1828, pero le preocupaba que los diversos partidos estatales no se unieran en un candidato a la vicepresidencia.
Como resultado, el Partido Demócrata siguió el patrón de la oposición y convocó una convención nacional.
El Comité de Reglas dio un breve informe que estableció varias otras costumbres.
No se realizó una votación nominal para nominar a Jackson para un segundo mandato.
Un sector disidente, favorable a Barbour, celebró una segunda Convención Nacional Demócrata en junio de 1832 en Staunton, Virginia.
Cuatro de los seis estados que no enviaron ningún delegado eran del Sur Profundo.
El excongresista John Sergeant de Pensilvania fue nominado con 64 votos a favor y seis abstenciones.
Richard Rush habría sido el nominado, pero rechazó la oferta, acción que el expresidente John Quincy Adams nunca le perdonaría, junto con su inclinación leve por Andrew Jackson.
Amos Ellmaker fue nominado para vicepresidente con 108 votos a uno para John C. Spencer (presidente de la convención) y dos abstenciones.
Los anuladores estaban formados por exmiembros del Partido Demócrata-Republicano que habían apoyado en gran medida a Jackson en las elecciones anteriores, pero eran defensores incondicionales de los derechos de los estados, algo que finalmente los hizo repudiar a Jackson durante su primer mandato.
[7] La campaña electoral giró en torno al Segundo Banco de los Estados Unidos.
Los eventos proselitistas del Partido Demócrata, en especial aquellos en los que Jackson participó, estuvieron marcados por una presencia popular masiva, y triunfaría por abrumador margen incluso en Pensilvania.
[8] La popularidad de Jackson entre el público estadounidense y la vitalidad del movimiento político con el que estaba asociado se confirma por el hecho de que ningún presidente pudo volver a obtener la mayoría del voto popular en dos elecciones consecutivas hasta Ulysses S. Grant en 1872.