En el solar donde se levantó dicho edificio existía un antiguo molino que data del año 1078.De estos períodos se han preservado algunos elementos arquitectónicos, como el soportal de la planta baja o el patio interior, así como decorativos, como las ventanas triforas del primer piso.Fue reedificado con escasos medios y se reconstruyó aprovechando los restos del propio palacio.Es precisamente en este momento cuando el establecimiento comienza a conocerse como La Fontana d'Or.En primavera del 2011, el histórico edificio iniciaba una nueva etapa convertido en CaixaForum Girona.