Esta característica es la diferencia respecto a una cámara web, que únicamente puede ejecutarse cuando está conectada a un ordenador personal (PC) por medio del puerto USB o IEEE 1394.
[2][3] Una cámara de red incorpora su propio miniordenador, lo que le permite emitir vídeo por sí misma.
Se puede acceder desde cualquier dispositivo conectado a Internet.
Con las cámaras IP se puede ver qué está pasando en este preciso momento.
El usuario se conecta a través de Internet a una dirección IP que tienen sus cámaras, algunos modelos permiten interacción con la ayuda de audio incorporado, y las funciones de tomar fotografías y grabar en video lo que está pasando Se suele asociar la visión nocturna de una cámara con que tenga visión por infrarrojos.