Butiá es un municipio brasileño situado en el estado de Rio Grande do Sul.
Quienes viajaban desde el interior a comercializar sus productos se detenían con sus caballos al pie de ese árbol para descansar.
La patrona del municipio es Santa Teresita y la festividad se celebra el 1 de octubre.
La explotación del carbón brindó sustento económico al municipio durante muchos años, ya que cuando Butiá era todavía una aldea muchas familias se instalaron en la zona con el propósito de dedicarse a la actividad minera.
Sin embargo, debido a la falta de una política energética para el carbón mineral como fuente, su importancia ha disminuido.