Ella era una buena estudiante, pero estaba más interesada en la moda, vestirse y los chicos.
Tuvo en 1938 un hijo, llamado Jerry, y en 1941 se separó de su marido.
Esta empresa tenía unos excelentes productos y ella empezó a venderlos haciendo demostraciones en casas.
En 1954] se convirtió en la primera mujer que llevó a la portada el Business Week.
A las mejores vendedoras les obsequiaba con regalos exóticos, como lanchas rápidas, viajes y aparatos electrónicos, todo cuidadosamente planificado, siempre las vendedoras en compañía de sus esposos.
Pronto el rostro reservado de Earl Tupper, hizo que el público dirigiera su mirada a Wise convertida en una celebridad.
Esto, unido a una constante disparidad de criterios, hizo que la relación entre ambos se desestabilizara.
Brownie Wise intentó formar su propia empresa de cosméticos, Cinderella (Cenicienta, en castellano), pero no tuvo éxito.