Dicha batalla tuvo lugar en el año 146 a C. y con ella finalizó la guerra aquea.
[1][2] Los romanos al mando de Lucio Mumio destruyeron Corinto tras un asedio.
[3] Ya dentro de la ciudad, Mumio mató a todos los hombres y vendió como esclavos a las mujeres y niños.
A continuación, incendió la ciudad,[4][5] por lo cual recibió el cognomen «Achaicus» como conquistador de la Liga Aquea.
[6] Con Grecia bajo el control de Roma, un nuevo capítulo se agregaba a la historia romana llamado la época grecorromana.