En ese momento, Barroco Andino entra en un período de inactividad y sus músicos siguen diversos rumbos.
El conjunto agrega también un nuevo elemento a su trabajo: la Voz, enriqueciendo las presentaciones en vivo con el canto de sus músicos.
Ese mismo año, 1985, Barroco Andino, con sus 10 integrantes, comienza a dar conciertos a lo largo de Chile, incluyendo sus áreas más remotas, y realiza su primera gira internacional, que tiene como destino Brasil.
En 1987, el grupo es invitado a Perú, al Segundo Encuentro Latinoamericano de la Nueva Canción, "CICLA 87".
Esta participación es seguida de un tercer viaje a Europa, que los lleva a escenarios de Bélgica, Holanda, Luxemburgo y Alemania; ese mismo año el conjunto actúa en Buenos Aires, Argentina.