Se han encontrado referencias a aguas medicinales en su ubicación que datan del siglo XIII.
En la Edad Media, junto a los pies del monte de Gellért, se construyó un hospital que sería transformado durante la ocupación turca en un baño termal.
Las instalaciones sufrieron daños durante la Segunda Guerra Mundial, pero fueron reconstruidas más adelante.
El complejo del Balneario Gellért comprende baños termales, esto es, pequeñas piscinas que contienen agua mineral de los manantiales cálidos del monte Gellért.
La composición de estas aguas incluye calcio, magnesio y sulfatos.