Sin embargo, esta misma característica también lo hace más susceptible a voltearse y derramarse.
A veces llevan un tubo de desprendimiento lateral, adosado al cuello del matraz, esto permite la salida de los vapores durante una destilación con dirección al condensador.
Para anclarlo, se puede colocar un peso de plomo o metal sobre el exterior.
Al calentarlo, suele colocarse sobre un aro, a su vez, está aferrado por medio de una doble nuez o alguna agarradera similar.
También es importante que al disponer de un cuello estrecho es posible taparlo con un tapón esmerilado, o con algodón hidrófobo.