Back to the Known

El título del trabajo y lo rápido que salió tras estrellarse con el innovador álbum anterior vienen a significar que este trabajo es una reconciliación con sus fanes, a los que consiguen calmar con la vuelta al sonido punk rock de sus orígenes.

Este sería el último lanzamiento de la banda antes de su primera crisis, que duraría hasta 1988 con el lanzamiento del histórico Suffer.

Varias novedades coinciden en Back to the Known.

Musicalmente, la banda abandona los sintetizadores y los teclados que tantas críticas (malas) recibieron por parte de sus seguidores con el anterior disco y vuelven al sonido punk de sus comienzos, aunque con melodías bastante más elaboradas.

En la formación aparece por primera vez Greg Hetson, que ya trabajó en una canción en How Could Hell Be Any Worse?, vuelve Pete Finestone a la batería y, la más significativa, la marcha de Brett Gurewitz, que tuvo que abandonar la banda para tratarse de su adicción a las drogas.