Aulo Atilio Calatino

Desempeñó también la censura en 247 a. C. y la dictadura en 249 a. C., siendo además el primer dictador en comandar un ejército fuera de Italia, entendida esta como la península italiana.

Calatino debía estar muerto en 216 a. C., puesto que Marco Fabio Buteón, censor en 241 a. C., es conocido por ser el excensor de más edad en aquellas fechas.

Primeramente tomó la ciudad de Hippana y después la fortificada Mytistratum, que la hizo cenizas.

Durante el asedio, cayó en una emboscada y habría perecido con todo su ejército de no haber sido por los esfuerzos generosos de un tribuno llamado Marco Calpurnio Flama, aunque otros cronistas lo llaman Quinto Cedicio o Laberio.

Hacia el final del año hizo un ataque a Lipara, donde las operaciones fueron continuadas por su sucesor.

Por todo ello, se decidió nombrar como sucesor de Glicia a Calatino y se le encargó inmediatamente que liderara los ejércitos en Sicilia, convirtiéndose así en el primer dictador romano en encabezar un ejército fuera de Italia.

Dicha región había sido conquistada durante el consulado de Marco Atilio Regulo Caleno (335 a. C.).