Ataque de la sinagoga Tiféret Israel

En la semana del ataque, Israel expulsó a los dos representantes de Venezuela en el país y en Palestina.

[2]​ La noche del 31 de enero, un grupo de 15 personas fuertemente armado sometió y amordazó a dos vigilantes de la sinagoga, permaneciendo por al menos cinco horas, destrozando objetos del judaísmo y pintando las paredes con grafitis antisemitas y antisionistas, pidiendo la expulsión de los judíos del país.

[4]​ En total el Ministerio Público acusó a seis personas, tres civiles y tres expolicías, mientras que el Tribunal 5° de Juicio del Área Metropolitana de Caracas los condenó por robo agravado, acto de desprecio contra culto y asociación para delinquir.

[6]​ El cardenal Jorge Urosa pidió rechazar la violencia religiosa y solicitó que no se importara al país el conflicto árabe-israelí.

[8]​[9]​ el canciller Nicolás Maduro y el ministro de Comunicación e Información Jesse Chacón también repudiaron los hechos.