La NWSA trabajó para que se incorporara a las mujeres en la enmienda constitucional federal.
Contrariamente, su rival, la Asociación Americana pro Sufragio de la Mujer (AWSA) liderada por Lucy Stone, consideraba que el éxito llegaría con mayor facilidad a través de las campañas estado por estado.
[2] En 1890 el NWSA y el AWSA se fusionaron para formar la Asociación Americana pro Sufragio de la Mujer (NAWSA).
Otros activistas que formarán parte de la asociación serán: Lucretia Mott, Martha Coffin Wright, Ernestine Rose (miembro del Comité Ejecutivo), Pauline Wright Davis (Consejera del Consejo de Rhode Island), Reverenda Olympia Brown, Matilda Joslyn Gage, Anna E. Dickinson (Vicepresidenta de Pensilvania), Elizabeth Smith Miller y Mary Cheney Greeley entre otras.
Tales medidas drásticas incluyeron el uso de apelaciones racistas para ganar aliados entre los demócratas.
[2] En 1883, Elizabeth Cady Stanton y las responsables de la Asociación Nacional adoptaron unos nuevos estatutos.
[5] Como explica Eleanor Flexner, "[La Nacional] estaba dispuesta a romper una lanza por las mujeres en dificultades sin importar sus circunstancias, ya fueran " mujeres con problemas por casos de divorcio, o costureras mal pagadas."