Race fue hipnotizado fácilmente por Puységur, pero cayó en un extraño trance que no se había producido anteriormente a través del mesmerismo.
Puységur se convirtió en poco tiempo en un reputado hipnotizador, tratando a gente de toda Francia.
Durante el periodo revolucionario el instituto fue disuelto y Puységur pasó encerrado en prisión dos años.
Sin embargo, Puységur siempre se definió a sí mismo como discípulo de Mesmer sin atribuirse la invención del procedimiento conocido como inducción hipnótica.
Sus contribuciones se olvidaron con el tiempo, hasta que Charles Robert Richet redescubrió sus escritos en 1884 y le atribuyó importantes descubrimientos en el campo de la hipnoterapia.