[1] Comenzó la escuela pero se fue tan rápido que era analfabeta y tuvo que aprender a leer y escribir mucho más tarde.
Fue solo después de la muerte de su segundo esposo que ella pudo recuperar su carrera y su canto se hizo popular.
En 1950 se hizo cargo del restaurante de Lisboa "Parreirinha de Alfama", que se convirtió en un centro para tocar el fado.
[2] Apareció en varias ciudades europeas, incluida su aparición en el Festival de Edimburgo.
[5] En 2013 recibió el premio (Infant D Henrique) del gobierno portugués.