Estas cámaras no llegaron a triunfar en el mercado, de modo que en 1997, cuando se produjo el regreso de Steve Jobs a la empresa, se canceló su producción y su venta.
[4] Esta vez, fue fabricada por Kodak, y una de sus mejoras fue la compatibilidad con Windows.
[7] Sin embargo, lo más destacado fue que incluía una pequeña pantalla para visualizar las fotografías tomadas, y que la velocidad de obturación se amplió, desde 1/4 a 1/5000.
[8] En este caso, la cámara funcionaba con tres pilas AAA[9] y su precio era de 600$[1] Tras estar más de 3 años en el mercado y pasar por varios fabricantes, esta línea de cámaras digitales lanzada por Apple no llegó a conseguir los beneficios que la marca esperaba.
Uno de los factores que propiciaron este fracaso es que empresas anteriormente citadas, como Kodak, Fujifilm, Canon y Nikon, que ya tenían un cierto prestigio en el mercado, acaparaban las compras de los aficionados, sin dar oportunidades a Apple.