Andrés fue bien recibido por Yaroslav I y pronto en 1038 le entregó a su hija Anastasia como esposa, celebrándose la boda en suelo Kievita.
En la Batalla junto al río Tisza, el príncipe Béla entró con sus ejércitos y venció a su hermano el rey Andrés I, quien murió durante la huida.
Salomón fue coronado y ejerció una política externa muy orientada hacia el Sacro Imperio Germánico, lo que generó el descontento de muchos nobles.
Por otra parte, los hijos del fallecido rey Béla I habían regresado al reino discutieron la paz con Salomón.
Al poco tiempo Salomón atacó frontalmente en varias ocasiones a sus primos generando un conflicto interno en el reino que parecía sin solución.