Ana Mojica inició su vida artística a los 6 años con una compañía chilena de ópera infantil, luego entraría a la Compañía Bogotana de Comedia.
[3] En esa ciudad, Mojica se inició en la actuación a comienzos de la década de 1950, destacándose principalmente en el teatro y en las radionovelas.
[4] En la década de 1960 su rostro empezó a ser familiar en la televisión colombiana, registrando apariciones en producciones como Dos rostros, una vida y Candó.
Posteriormente se destacó en otras producciones para televisión como La feria de las vanidades, La marquesa de Yolombó, La abuela, Pero sigo siendo el rey y Vidas trocadas, además de actuar en películas como La abuela, Caín y Tiempo para amar.
[4] Su última aparición ocurrió en la popular telenovela Pasión de gavilanes en 2003, tras lo cual se trasladó a la ciudad de Miami para dedicarse a su familia.