Hijo del fotógrafo José Núñez Larraz y de Ángela San Francisco, nació y se formó en Salamanca, su ciudad natal.
Escribió numerosos libros de poesía y dejó una obra pictórica no menos abundante.
Hombre sumamente culto, sabía expresarse en dos lenguajes artísticos —uno plástico, otro poético— con gran soltura y conocimiento y supo reconocer en la traducción el mejor ejercicio para desarrollar la capacidad técnica del poeta.
Tradujo, entre otros, a Propercio, Catulo y Rimbaud.
Aníbal Núñez tuvo problemas para publicar el resto de sus libros, y aquellos que cruzaban el umbral de lo inédito sufrían con frecuencia numerosas cortapisas y restricciones.