Fue adoptada por el Ejército de los Estados Unidos en 1957, convirtiéndose desde entonces en una pieza básica del arsenal estadounidense, estando presente en todos los conflictos desde esa fecha.
Además, el bípode estaba soldado al cañón, haciendo el arma más pesada y cara de producir.
La variante M60E2 corrige estos problemas y están disponibles «kits» de transformación para convertir las viejas M60 al modelo E2.
Sin embargo, sigue estando en servicio en el ejército de Estados Unidos, así como otros países (especialmente Australia); su producción continua en el siglo XXI.
Para el primer fin destaca por su cadencia de disparo moderada, gran alcance efectivo, y un calibre mayor que el del fusil estadounidense en servicio, el M16.