La alopecia frontal fibrosante es un tipo particular de alopecia (pérdida de cabello) poco habitual, que suele presentarse en mujeres a partir de los 50 años, principalmente después de la menopausia.
Se caracteriza porque retrocede progresivamente la zona de implantación del cabello en la región frontal y temporal, perdiéndose también el pelo en las cejas y a veces en las axilas.
La primera descripción fue realizada por Kossard en el año 1994.
[1][2] La enfermedad afecta a mujeres y progresa lentamente durante años, los primeros síntomas se presentan entre los 45 y 82 años, por término medio a los 63.
El origen del proceso no se conoce, para algunos especialistas se trata de una variedad de otra enfermedad de la piel conocida como liquen plano.