Surgido de las inferiores de River llegó a jugar muy poco tan solo 3 partidos en 1973.
Al año siguiente fue transferido a Atlético de Tucumán, club en donde no tuvo mucha participación.
Finalmente llegó a Estudiantes de Buenos Aires en 1977, jugó 147 partidos y anotó 4 goles.
Se consolidó en Estudiantes de Buenos Aires y tuvo una gran actuación en el ascenso, destacándose en el torneo de la Primera B 1977.
En su homenaje, un sector del Estadio Ciudad de Caseros lleva el nombre de Beto Pafundi.