Nació en Santiago de Chile, fue hijo de Wenceslao Díaz Gallegos y María Luisa Lira.
Tras su paso por Colchagua, Díaz se dedicó a negocios industriales y mineros, trasladándose a Bolivia.
Regresó a Chile en marzo de 1920; en esa época era representante de la Compañía Petrolífera de Calacoto, y consideraba que la explotación de petróleo en el país altiplánico "tenía más superioridad para el capital chileno que para el norteamericano", logrando que el gobierno boliviano modificara la legislación "en sentido favorable para que pudieran hacerse grandes inversiones por capitalistas de Chile".
[5] Falleció en Santiago, a los 63 años de edad,[3] a causa de un cáncer gástrico.
Fue sepultado en el Cementerio General de Santiago.