Al-Muntásir

Sucedió a su padre en el trono califal en 861, gracias al apoyo de la facción turca, y tras el asesinato de su predecesor por un soldado turco.

Al-Muntásir parece haber estado implicado en dicho crimen.

En lugar de éstos, se nombró sucesor al hijo del califa.

Al-Muntásir contó con muchos apoyos porque, al contrario que su padre, era partidario de la casa de Alí y del islam chií; además levantó la prohibición de peregrinaje a las tumbas de Hasan ibn Ali y Husáyn ibn Ali.

Es el primero de los abasíes cuya tumba se conoce, pues la mandó construir su madre, una esclava de origen griego.