Airbus A300

Inspiró algunos bimotores de Boeing como el B767 o el B777, y allanó el camino para los vuelos ETOPS.

Cuando entró en servicio en 1974 el A300 era técnicamente muy avanzado, y tuvo gran influencia en los diseños posteriores de aviones subsónicos.

En cierto momento, debido a la crisis del petróleo, Airbus tuvo 16 unidades sin vender, aparcadas con el fuselaje todo blanco esperando comprador.

En 1977 Eastern Airlines se interesó por el modelo y alquiló cuatro A300 para probar como se adaptarían a sus rutas y a su flota, hasta ese momento compuesta exclusivamente por modelos americanos.

Posteriormente compró 23, y desde entonces el A300 se vendió en gran cantidad, hasta alcanzar la cifra actual de 843 ejemplares fabricados.

Aerocondor exhibió, con vuelos de demostración, el nuevo avión en el mercado latinoamericano y al mismo tiempo se realizaron pruebas, con despegues en Bogotá y La Paz que simulaban la falla de un motor, para comprobar el rendimiento del A300 en aeropuertos situados a gran altura.

En el primer vuelo entre La Habana y San Diego (California), al aterrizar el Airbus A300, se paralizó el aeropuerto, pues este tipo de avión era totalmente desconocido.

La introducción de las reglas que permitirían a los aviones bimotores volar aquellas largas distancias que antes estaban afuera de sus límites (ETOPS), permitió a Airbus ofrecer el A300 adicionalmente como avión para distancias medias y largas.

El A300 dio a Airbus la experiencia necesaria para fabricar y vender aviones de forma competitiva.

El fuselaje del A300 fue posteriormente acortado (A310), alargado (A330 y A340) o modificado (Airbus Beluga).

Versión acortada con nuevas alas, cola más pequeña y cabina de vuelo para 2 tripulantes.

Prototipo del Airbus A300 en Toulouse
A300C4-605R de Islandsflug Cargo .
A300 de Alitalia
A300 de Corsairfly
A300 de Iberia
A300B4-203F de Tradewinds Airlines
Geometría descriptiva del Airbus A300B6.