Fabricadas entre 2021 las piezas son un espacio vacío, con unos papeles de certificación firmados por el artista vendidos a 38.000 dólares.
[1][2] Como arte conceptual, consiste en un certificado de autenticidad que lleva adheridos diagramas detallados e instrucciones para su correcta exhibición por parte del comprador.
“Afrodita llora” es una escultura inmaterial que existe solo porque así lo ha decidido el artista.
[4] Garau afirma: “En el momento en que decido exponer en un determinado espacio una escultura inmaterial, ese lugar concentrará una cierta cantidad y densidad de pensamientos en un punto preciso, creando una escultura que, solo con mi título, tomará las formas más diversas.
Nuestro ser carne y hueso debe enfrentar la Ausencia, que es la verdadera presencia en estos tiempos”.