Tal obra se construyó en ladrillo y cantera verde (esta última tan común en la zona); y llegaba hasta la ciudad desde la Sierra Norte, aprovechando los manantiales del lugar, para ser más exactos, en las laderas del cerro de San Felipe.
Se sabe que su construcción comenzó a mediados del siglo XVIII y no fue terminada hasta el año de 1751, siendo financiada por los señores Juan G. Márquez, Manuel Landeta, José Sánchez y Juan de Pascua y Obrien.
[1] Los arcos que soportan el acueducto son de medio punto y constaba de una caja de agua en su trayecto final, la cual se ubica a un costado del templo del Carmen Alto.
Desde esta caja se distribuía el agua a través de una cañería subterránea a varias fuentes públicas de la ciudad.
El tramo mejor conservado, es el que corresponde a la arquería que pasa por la pequeña barranca de Xochimilco, y que se le conoce como "La cascada", el cual se remozó el entorno para darle una mejor perspectiva.