En la actualidad es muy común que la estructura principal de los edificios altos esté formada por perfiles pesados laminados en caliente; en cambio, los elementos secundarios como viguetas, paneles o cubiertas y entrepisos generalmente lo componen miembros conformados en frío.
Durante los años 30 del pasado siglo el desarrollo y aceptación de los perfiles conformados en frío afrontó verdaderas dificultades, entre otras cosas debido al escaso número de especificaciones de diseño y publicaciones que abarcaran estos temas.
Se descubrió entonces que dichos elementos experimentan pandeos locales principalmente en dependencia de sus condiciones de unión en los extremos y en la relación ancho plano a espesor existente.
El alcance de este método se extiende solo a perfiles conformados en frío con un espesor menor que 1 pulgada (25.4mm) y aunque se alienta el uso de aceros con denominación ASTM listados en la Sección A3.1 de la Especificación, también se pueden utilizar otros aceros, siempre que satisfagan los requisitos establecidos en dicha sección.
Por otra parte, el conformado en frío genera una disminución de la ductilidad[1]