Accidente de A-10 en Remscheid de 1988

Además del piloto, cinco personas más murieron en tierra.

Según las notas de prensa[1]​ el avión se encontraba realizando un ejercicio de vuelo a baja cota.

Pertenecía a una unidad de la Base Aérea de Bentwaters pero en el momento del accidente estaba en la Base Aérea de Nörvenich.

[5]​ Otra posible explicación para el aumento de casos de cáncer en los alrededores, que fue ganando en credibilidad dado que no se encontró uranio en la zona, es que el avión portase combustible JP-8.

Este combustible de aviación está considerado como altamente tóxico y podría haberse esparcido por los alrededores del lugar de impacto.