Abhijna o Iddhi (logro),[1] en la filosofía budista significa conocimiento[2] y hace referencia en el contexto del budismo Theravada a una serie de supuestas habilidades de origen psíquico[3] logradas a través de la meditación profunda denominada dhyana[4] (absorción mental en nociones) o el desarrollo de la ruta (Iddhipada).
[1][5][1][6] Esas habilidades son consideradas ilusorias o cambiantes (maya) dentro del budismo pero en el espacio-tiempo permiten el control de la naturaleza y la superación de las leyes físicas.
Se considera que tales capacidades aparecen con la consecución del cuarto dhyana (equanimidad) y el cultivo de la mente (Bhavana) que conduce al quinto dhyana prajñā (sabiduría) dando como resultado la comprensión de los elementos en sus niveles más profundos.
[3] Esto trae el entendimiento de la mente original como presencia vacua y no-dual shuniata, estado de budeidad en la que todas las cosas surgen en ella como condicionadas porque existen solo en potencial.
De modo que no es posible encontrar nada en el mundo que tenga una naturaleza propia y por lo tanto para el budismo Hinayana, el mundo es ilusorio, como teorizó Nāgārjuna.