Muy estudioso desde la infancia, viajaba a Jaén para acudir a las clases que impartía Abu l-Hassan b.Malik al-Ya’miri, famoso qadi de Úbeda.
[2] Ibn Abi l-Jisal ejerció como katib (secretario), labrándose una buena fama.
Profundizó en muy diversas ramas del saber y se ocupó asimismo como profesor, tanto en su casa de Córdoba como en otros lugares.
Consiguió alcanzar un puesto social significativo, obteniendo el título de «dul wizaratayn».
[3][2] Se conservan, en su mayoría aún en manuscritos inéditos, fragmentos de sus obras en prosa, en verso, cartas publicadas por personajes ilustres de la época, etcétera.