El sufijo -ești (pronunciado [eʃtʲ], a veces cambiado a -ăști [əʃtʲ]) está muy extendido en los topónimos (nombres de lugares) rumanos y moldavos.
Es la forma plural del sufijo posesivo -escu, utilizado anteriormente para los nombres de pila y actualmente extendido en los apellidos (Ionescu, Popescu).
[1][2] La hipótesis más aceptada dice que proviene del sufijo *-isk, de origen tracio, o bien del latín -iscus.
[2] Otras formas de escribirlo ya obsoletas son -esci y -eșci, utilizados durante algunas décadas hasta principios del siglo XX.
El 13'1% de municipios rumanos (2.403 localidades) poseen este sufijo en su nombre, incluyendo la capital, București, convirtiéndolo en el sufijo más común en todo el país.