La planificación del crecimiento es una actividad comercial estratégica que permite a los propietarios de empresas planificar y hacer un seguimiento del crecimiento orgánico de sus ingresos. Permite a las empresas asignar sus recursos limitados a un esfuerzo centrado en adaptarse a los cambios en la industria impulsados por la disrupción digital y diferenciarse de los competidores. Las estrategias y tácticas incluidas en un plan de crecimiento se centran en el impulsor clave de la generación de ingresos: el cliente. [1]
Las empresas suelen desarrollar un plan de crecimiento después de determinados eventos desencadenantes, como la falta de ventas, una competencia intensa y un crecimiento inesperado. Las empresas que se encuentran en situaciones como estas desarrollarán un plan de crecimiento para priorizar los recursos y tomar medidas correctivas para seguir en el buen camino. [2]
Un plan de crecimiento solo contiene los elementos de una empresa en los que el cliente puede ver valor . Comienza estableciendo objetivos comerciales y conduce a las estrategias y tácticas para alcanzarlos. El beneficio de esto es que permite a las empresas conectar sus objetivos con acciones precisas. [ cita requerida ] Las pequeñas empresas se centran en la penetración del mercado para vender más a los clientes existentes. Un plan de crecimiento para pequeñas empresas más maduras es el desarrollo del mercado donde venden ofertas existentes a un mercado diferente (por ejemplo, un estado o país vecino). Las empresas más grandes tienden a centrarse en llegar a los clientes a través de canales alternativos (por ejemplo, en línea) o ampliar su clientela objetivo a través del desarrollo de productos para resolver sus problemas únicos. [3]
Al comenzar a desarrollar un plan de crecimiento, se consideran tres preguntas clave: [ cita requerida ]
Para responder a estas preguntas, las empresas trazan el siguiente plan de nueve pasos: [ cita requerida ]
Al implementar un plan de crecimiento, la gerencia investigará si está alineado con la estructura organizacional actual. En los casos en que no lo esté, la gerencia debe preguntarse si debe adaptar la estructura organizacional o no. Además, el crecimiento rápido puede ejercer presión sobre los procesos existentes. Si los procesos no son escalables, la gerencia debe abordar estas cuestiones antes de crecer, ya que los costos de solucionar los problemas posteriormente son mayores. [4]
Un plan de negocios se centra en los objetivos de la empresa y en la información general sobre la organización y los miembros clave del equipo. Por lo general, se desarrolla para un período de entre 3 y 5 años y es útil cuando se busca financiación externa, ya sea de bancos o inversores.
Por otro lado, un plan de crecimiento es de corto plazo, normalmente de uno a dos años o menos. Se centra a un nivel mucho más profundo en la sección de lanzamiento al mercado que suele verse en un plan de negocios. La planificación del crecimiento tiene como objetivo ser ágil y adaptarse a las condiciones cambiantes del mercado a las que se enfrentan las empresas, en particular a través de la tecnología y los medios digitales. [5]