El Plan DN-III-E o Plan de Auxilio a la Población Civil en Casos de Desastre es una serie de medidas implementadas principalmente por la Secretaría de la Defensa Nacional de México , específicamente por el Ejército Mexicano y la Fuerza Aérea Mexicana organizados como un organismo bajo el nombre de Fuerza de Apoyo en Casos de Desastre (FACD). Éste actúa como respuesta a una situación desastrosa que afecte o pueda afectar a un grupo numeroso de civiles en México y, en algunos casos, en el extranjero. También se le conoce como la misión del 3.er Ejército encomendada para salvaguardar y proteger a la población civil en caso de desastre.
Lo anterior con base en lo establecido en la Ley de Protección Civil, el Plan Nacional de Desarrollo y la Ley Orgánica del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos, todo ello bajo la coordinación del Sistema Nacional de Protección Civil (SINAPROC). [1] [2]
Iniciada después de la Segunda Guerra Mundial el Ejército Mexicano realizó una serie de reformas con la finalidad de convertirlo en una fuerza armada moderna, entre las que destacan la serie de acciones para implementar los planes estratégicos con el fin de minimizar las consecuencias de las diferentes acciones que ponían en riesgo la seguridad nacional . En la década de 1960 se pusieron en vigor los Planes de Acción del Ejército, mismos que se modifican en 1966 pasando a ser los Planes de Defensa de la Secretaría de la Defensa Nacional, los cuales cubrían desde el caso de una guerra exterior, hasta el caso de una situación desastrosa entre la población, y se establece el Plan de Defensa Nacional No. III el 18 de septiembre de 1965, en el que se introdujo el Anexo E - Título del Plan de Ayuda a la Población Civil en Casos de Desastre conocido por sus siglas DN-III-E, apodado "DN-Tres-E". Las inundaciones del Río Pánuco en 1966 dieron lugar al primer operativo Plan DN-III-E para rescatar y brindar socorro a los habitantes afectados de los estados de Veracruz y Tamaulipas, sobrenombre que posteriormente daría nombre a las medidas que resultarían un gran éxito entre el pueblo mexicano, ya que la Secretaría de la Defensa Nacional, cada vez que una calamidad natural o provocada por el hombre azotaba al país, montaba operativos para auxiliar a la población en esos tiempos difíciles de desastre, tradición que continúa hasta nuestros días.
Después del terremoto de la Ciudad de México en 1985 se creó oficialmente el Sistema Nacional de Protección Civil , mediante el cual como respuesta la Secretaría de Marina Armada de México reformó el Plan Marina (lanzado en 1968) para cubrir las zonas costeras donde está mejor equipada para servir a las fuerzas de la SEDENA durante las calamidades. [1] [2] Así, ambas Secretarías han sido desde entonces responsables de la protección civil y de las operaciones de socorro y respuesta ante desastres durante calamidades dentro del territorio nacional, papel que hoy comparte con la Guardia Nacional .
A partir del 19 de septiembre de 2017, como resultado directo del terremoto de Chiapas de 2017 , se implementó el Plan DN-III-E en las áreas afectadas del sur de México y se desplegaron unidades del Ejército y la Fuerza Aérea para implementar el programa. También se desplegaron en el centro de México como resultado del terremoto del 19 de septiembre de 2017 para brindar ayuda y apoyo a las víctimas de esta calamidad.
La Fuerza de Apoyo para Desastres (FACD) es una formación permanente de la Secretaría de la Defensa Nacional creada el 10 de febrero de 2000, integrada por una agrupación de unidades terrestres y aéreas, los Cuerpos de Ingenieros Militares, de Servicios, de Sanidad, de Intendencia, que son apoyadas por unidades integradas por cadetes de último año de las academias y escuelas militares, la Fuerza de Tarea Valle de México y las brigadas de Infantería Ligera 4 y 5. En el brazo aéreo de su componente se encuentran helicópteros y aviones de transporte. Todos están bajo el mando directo del Secretario de la Defensa Nacional quien operativamente será el jefe de un Comando designado por él para el Estado Mayor integrado por oficiales y suboficiales del Ejército y Fuerza Aérea. [3]
Durante desastres como la temporada de huracanes, terremotos, inundaciones, incendios forestales y deslizamientos de tierra y si durante grandes calamidades provocadas por el hombre, la Secretaría despliega 4 Brigadas de Ingenieros de Desastres (AICD), que están asignadas en las ciudades de Guadalajara , Monterrey , Mérida y Ciudad de México , con equipo similar, que consiste en vehículos pesados y ligeros, equipo de rescate, cocinas comunitarias y personal especializado. [3] Junto a ellos se encuentran personal médico especializado capacitado en respuesta a desastres en los sectores de salud y medicina, policías militares (incluidos destacamentos K-9) y personal listo para SAR (búsqueda y rescate) del Ejército y la Fuerza Aérea. Durante los incendios forestales, los helicópteros de la Fuerza Aérea asisten al personal de las fuerzas terrestres utilizando equipo de extinción de incendios en las áreas afectadas, durante las inundaciones, las operaciones de rescate aéreo y acuático son realizadas por las dos ramas del servicio.
A partir de 2023, el Batallón de Acción de Emergencia del Ejército se agregó al ORBAT de la FACD.
El Plan DN-III-E se basa en seis puntos básicos que son: [4]