Kuehneosauridae es una familia extinta de pequeños diápsidos planeadores parecidos a lagartos conocidos del período Triásico de Europa y América del Norte .
Se distinguen de otros diápsidos por sus "alas" formadas por costillas alargadas. Estas permitían al animal planear y saltar en paracaídas de forma similar a los lagartos planeadores actuales . Lo más probable es que fueran insectívoros, a juzgar por sus dientes en forma de alfiler. A menudo, pero no siempre, se los coloca en el grupo Lepidosauromorpha , [3] aunque otros estudios los han recuperado en otras posiciones dentro de Sauria , incluido Archosauromorpha . [4]
El miembro más antiguo y primitivo conocido es Pamelina del Triásico Temprano ( etapa Olenekiana ) de Polonia , que ya tiene vértebras con características consistentes con el planeo o el paracaidismo. [3] Icarosaurus es conocido a partir de un solo espécimen de la Formación Lockatong de Nueva Jersey, de edad Carniense . [5] Los kuehneosauridos del Triásico Tardío ( etapa Noriense ) de Inglaterra , Kuehneosaurus y Kuehneosuchus , son muy similares y se pueden distinguir entre sí principalmente por la longitud de sus costillas de "ala", relativamente cortas y masivas en Kuehneosaurus pero más largas y gráciles en Kuehneosuchus. Kuehneosaurus probablemente solo era capaz de lanzarse en paracaídas, mientras que Kuehneosuchus probablemente podía planear. [6] Rhabdopelix puede haber sido un kuehneosaurido; sin embargo, los fósiles se perdieron y las características descritas no son completamente consistentes con los otros miembros de la familia. [5]
Los kuehneosáuridos no fueron los primeros vertebrados voladores. Los weigeltisáuridos ("Coelurosauravidae") que vivieron en épocas tan lejanas como el Pérmico tardío también tenían alas membranosas sostenidas por huesos. Pero la anatomía de estos grupos es demasiado diferente como para considerarlos parientes cercanos, aunque tanto los weigeltisáuridos como los kuehneosáuridos pertenecen a los reptiles diápsidos. [6]
El cladograma que aparece a continuación es el resultado de un análisis realizado en 2009 por los paleontólogos Susan E. Evans y Magdalena Borsuk−Białynicka. [7]