El HMS Devastation fue el primero de los dos acorazados de la clase Devastation construidos para la Royal Navy británica.
Durante sus primeros quince años de servicio, estuvieron considerados como los buques más potentes del mundo.
[1] El Devastation fue construido en la década de 1870, en un momento, en el cual, la propulsión a vapor, se había establecido entre las principales potencias navales del mundo.
El buque, podía alcanzar una velocidad de 13,84 nudos (25,6 km/h) con una autonomía máxima de 5500 millas náuticas (8850 km), lo cual, se consideraban buenos registros en su época.
Posteriormente, fue modernizado de nuevo, se le asignó a la primera flota de reserva, con base en Escocia.