La escala de Barthel es una escala ordinal que se utiliza para medir el desempeño en las actividades de la vida diaria (AVD). Cada ítem de desempeño se califica en esta escala y se asigna un número determinado de puntos a cada nivel o clasificación. [1] Utiliza diez variables que describen las AVD y la movilidad. Un número más alto se asocia con una mayor probabilidad de poder vivir en casa con un grado de independencia después del alta hospitalaria. La cantidad de tiempo y asistencia física requerida para realizar cada ítem se utiliza para determinar el valor asignado a cada ítem. Los factores externos dentro del entorno afectan la puntuación de cada ítem. Si se cumplen las adaptaciones fuera del entorno doméstico estándar durante la evaluación, la puntuación del participante será menor si estas condiciones no están disponibles. Si se realizan adaptaciones al entorno, deben describirse en detalle y adjuntarse al índice de Barthel. [2]
La escala se introdujo en 1965, [3] y arrojó una puntuación de 0 a 100 (Mahoney, FI y Barthel, DW, 1965. Functional Evaluation: The Barthel Index. Maryland state medical journal, 14, pp. 61-65.). Collin et al. (1988) argumentaron que el sistema de puntuación original daba una impresión exagerada de precisión y posteriormente propusieron una modificación en la que cada dominio se puntuaba en incrementos de un punto con una puntuación total de 20 que indicaba independencia funcional (Collin, C. et al., 1988. The Barthel ADL Index: a reliability study. International availability studies, 10(2), pp. 61-63.). La versión sensibilizada discrimina claramente entre desempeño bueno y mejor y desempeño malo y más malo. Su eficacia no se limita a la rehabilitación hospitalaria, sino también a la atención domiciliaria, la atención de enfermería, la enfermería especializada y la comunidad. El índice de Barthel es una de las primeras contribuciones a la literatura sobre el estado funcional y representa el largo período en el que los terapeutas ocupacionales han incluido la medición de la movilidad funcional y las actividades de la vida diaria en su ámbito de práctica. [1] La escala se considera confiable, aunque su uso en ensayos clínicos en medicina del accidente cerebrovascular es inconsistente. [4] Sin embargo, se ha utilizado ampliamente para monitorear los cambios funcionales en personas que reciben rehabilitación hospitalaria, principalmente para predecir los resultados funcionales relacionados con el accidente cerebrovascular. Se ha demostrado que el índice de Barthel tiene portabilidad y se ha utilizado en 16 afecciones diagnósticas importantes, así como en diferentes entornos clínicos (por ejemplo, hogares de ancianos) con una confiabilidad y validez satisfactorias. [5] El índice de Barthel ha demostrado una alta confiabilidad entre evaluadores (0,95) y confiabilidad test-retest (0,89), así como altas correlaciones (0,74-0,8) con otras medidas de discapacidad física. [1]
Información sobre derechos de autor: La Sociedad Médica del Estado de Maryland posee los derechos de autor del Índice Barthel. Puede utilizarse libremente para fines no comerciales con la siguiente cita: Mahoney FI, Barthel D. "Functional evaluation: the Barthel Index". Maryland State Med Journal 1965;14:56-61. Utilizado con autorización. Se requiere autorización para modificar el Índice Barthel o usarlo con fines comerciales.
Las diez variables abordadas en la escala de Barthel son: [3]