El sondeo eléctrico vertical ( SEV ) es un método geofísico para la investigación de un medio geológico. El método se basa en la estimación de la conductividad o resistividad eléctrica del medio. La estimación se realiza en base a la medición del voltaje del campo eléctrico inducido por los electrodos puestos a tierra distantes (electrodos de corriente).
Las figuras 1 a 4 muestran la posible configuración del sistema de medición. Los electrodos A y B son electrodos de corriente que están conectados a una fuente de corriente; N y M son electrodos de potencial que se utilizan para las mediciones de voltaje. Como fuente se utiliza corriente continua o corriente alterna de baja frecuencia.
La interpretación de las mediciones se puede realizar en base a los valores de resistividad aparente. La profundidad de investigación depende de la distancia entre los electrodos de corriente. Para obtener la resistividad aparente en función de la profundidad, las mediciones para cada posición se realizan con varias distancias diferentes entre los electrodos de corriente. La resistividad aparente se calcula como
Aquí, k es un factor geométrico, — voltaje entre los electrodos М y N, — corriente en la línea AB. El factor geométrico está definido por
Aquí r es la distancia entre electrodos.
La interpretación de los datos recopilados se realiza en función de la dependencia ρ k (AB/2).
La aplicación de grandes conjuntos de electrodos permite reconstruir estructuras tridimensionales complejas de medios geológicos (véase Tomografía de resistividad eléctrica ). Sin embargo, la interpretación de dichas mediciones es bastante difícil. En este caso, se pueden aplicar técnicas de interpretación avanzadas basadas en métodos numéricos.