El loro frente granate ( Rhynchopsitta terrisi ) es un loro grande parecido a un guacamayo . Es de color verde oscuro con un hombro rojo oscuro y una frente y una raya en los ojos de color granate. La parte inferior de las alas y la cola parecen negras cuando está en vuelo. Emite un sonido agudo y ondulante . Los grupos suenan similares al pájaro carpintero bellotero si se escuchan desde la distancia.
La especie es endémica del noreste de México , donde sólo sobreviven entre 2500 y 3000 aves en estado salvaje.
R. terrisi es una de las dos especies existentes y una extinta del género Rhynchopsitta de loros de pico grueso .
El loro de frente granate es un loro grande, mayormente verde, que mide de 40 a 45 cm (16 a 18 pulgadas) de largo y pesa de 390 a 470 g (14 a 17 oz). [3] [4] Los adultos tienen una ceja de color marrón oscuro que se extiende sobre el borde de piel amarilla desnuda que rodea los ojos. Tienen un rojo más brillante en la curva del ala. La cola es larga y puntiaguda. La parte inferior de las alas es negruzca. El juvenil tiene un pico pálido, anillos oculares blanquecinos y carece de la franja granate oscura sobre cada ojo. [5]
Los loros frente granate viven en bosques maduros de pino , mixtos de coníferas y pino-encino de 2000 a 3500 metros. Esta ave es endémica de la Sierra Madre Oriental en Nuevo León , Coahuila y Tamaulipas , México .
Anidan en acantilados de piedra caliza cerca de aguas en movimiento en grandes colonias . La cría coincide con la fructificación de los pinos, que es su principal fuente de alimento. Ponen de uno a tres huevos en julio y los juveniles empluman alrededor de noviembre. Migran estacionalmente distancias cortas.
Esta ave se considera en peligro de extinción debido al pastoreo excesivo y la destrucción de su hábitat . [1]
El ITESM Campus Monterrey lleva a cabo programas de educación ambiental e investigación científica en el Parque Nacional Cumbres de Monterrey y Sierra de Arteaga para la conservación de la cotorra frente cimarrón.