Obtuvo buenos resultados defendiendo los tableros del equipo de EE. UU.
en las olimpiadas del ajedrez de Praga 1931, Varsovia 1935 y Estocolmo 1937.
Fue también durante diez años el columnista de ajedrez del New York Times.
En 1932 fundó, junto con Isaac Kashdan, la Chess Review (Revista de Ajedrez), que hizo mucho por la popularización de este juego en los Estados Unidos.
Ganó premios en diferentes torneos, incluyendo el primer puesto en el Campeonato de EE. UU.