Hans Decker fue un escultor alemán de mediados del siglo XV. Su hogar estaba en Núremberg , pero por lo demás hay muy pocos datos sobre él.
Su nombre aparece mencionado en un registro del año 1449 y se le atribuyen algunas producciones tempranas de los años 1432 y 1437. Aunque su talla en piedra es bastante tosca, se destaca entre sus contemporáneos por su energía y realismo.
Entre sus esculturas principales destacan la colosal estatua de San Cristóbal con el Niño Jesús sobre sus hombros, en el portal sudoeste de la iglesia de San Sebaldo , monumento conmemorativo de la familia Schlüsselfeld, y el gran "Entierro", fechado en 1446, en la capilla de San Wolfgang, en la iglesia de San Egidio. El grupo está compuesto por ocho figuras de proporciones heroicas y poderosamente dispuestas. En el cuerpo de Cristo, el tratamiento es duro, pero hay un claro intento de correcta anatomía. La cabeza es noble y varonil; María está llena de dolor; Juan levanta el brazo de su Maestro para besarlo. Los ropajes son sencillos y finamente dispuestos.
Esta obra está llena de la nueva tendencia naturalista.