Dirk Willems († Asperen, Gelderland, Holanda 16 de mayo de 1569) fue un mártir anabautista, es famoso por escapar de la prisión y volver para rescatar a su perseguidor, que había caído a través del hielo mientras perseguía a Willems, para luego ser capturado, torturado y asesinado por su fe.Descubiertas sus prácticas religiosas por las autoridades, fue capturado en su casa y encarcelado.Sin embargo, un guardia se dio cuenta de la fuga, lo siguió y en la búsqueda rompió el hielo, pidiendo ayuda mientras luchaba entre el agua helada.[1] Willems se devolvió a salvar la vida de su perseguidor, siendo así recapturado y estuvo en la cárcel hasta que fue ejecutado en la hoguera cerca de su ciudad.[3] También lo recuerdan como un héroe popular los habitantes contemporáneos de Asperen, que no son anabautistas.