El poeta y miembro del club George Sterling se ajustaba a esta nueva definición:[8] Se dice que Oscar Wilde, en su visita al Club en 1882, comentó “Nunca en mi vida había visto tantos bohemios con aspecto de hombres de negocios bien vestidos y bien alimentados”.Los miembros del Club han incluido algunos presidentes estadounidenses (por lo general antes de que fueran elegidos para el cargo), muchos funcionarios del Gabinete y directores ejecutivos (CEO o Chief Executive Officer) de grandes corporaciones, como por ejemplo instituciones financieras importantes.Entre los principales contratistas militares, las empresas petroleras, los bancos (incluida la Reserva Federal), los servicios públicos y los medios de comunicación nacionales hay funcionarios de alto nivel que son miembros o invitados del Club.Para ser admitidos como miembros los artistas deben pasar una prueba rigurosa que demuestre su talento.Si bien cuando están reunidos en grupos los bohemios por lo general respetan ese lema, las conversaciones sobre negocios no son raras entre pares de miembros.[13] En el exterior del edificio un relieve de bronce creado por Jo Mora recuerda al autor y poeta Bret Harte.
El periodista Bret Harte escribió por primera vez como “El bohemio” en el periódico
Golden Era
.
Michael Henry de Young, propietario del diario
San Francisco Chronicle
, en cuyas oficinas se organizó la fundación del Bohemian Club.
El búho que simboliza al Club está empotrado en la pared de la entrada principal del 624 de la calle Taylor, flanqueado por las letras
B
y
C
y rodeado por las palabras que expresan el lema de la institución.
El santuario del búho, cubierto de musgo, se alza entre los árboles, detrás de un escenario, a la orilla de un estanque artificial.
Relieve creado por Jo Mora en memoria de Bret Harte.