Sus primeros años transcurrieron en su Polonia natal, cuando el territorio pertenecía al Imperio Ruso de los zares.
En París entabló contacto con Maurice Ravel y cultivó la amistad de otros músicos extranjeros, entre ellos Martinu y Andrés Segovia, para quien compuso varias obras guitarrísticas.
[1][2][3] El estallido de la Segunda Guerra Mundial y la persecución de los judíos por los nazis, le obligó a huir de Francia, junto a su familia, para refugiarse en Estados Unidos, donde estableció una gran amistad con Stravinsky y escribió dos sinfonías, una de ellas dedicada a los muertos en la contienda, In Memoriam por los muertos por Francia, y música para cine en colaboración con realizadores como Julien Duvivier, Fritz Lang y Dudley Nichols.
En 1946, una vez derrotado el ejército alemán y finalizada la contienda, volvió a París.
Tras su regreso a Francia, alcanzó su plena madurez como compositor, siendo reconocido internacionalmente y sus obras interpretadas como parte del repertorio de numerosas orquestas, asimismo realizó giras por diferentes países, entre ellos Polonia, España, Alemanía, Italia, Bélgica, Holanda e Israel.