Por lo tanto, es de la mayor importancia definir la interfaz entre el equipo del usuario final y la red.
X.25 está orientado a conexión y trabaja con circuitos virtuales tanto conmutados como permanentes.
[1] La norma X.25 es el estándar para redes de paquetes recomendado por CCITT, el cual emitió el primer borrador en 1974.
Además, X.25 proporciona algunas facilidades muy útiles, como por ejemplo en la facturación a estaciones ETD distintas de la que genera el tráfico.
En cierto sentido la comunicación entre un anfitrión y un conmutador de paquetes X.25 es una red miniatura que consiste en un enlace serial.
X.25 ha sido adoptado para las redes públicas de datos y es especialmente popular en Europa.
X.25 es un protocolo que se basa en las primeras tres capas del modelo OSI.
X.25 asume que el nivel físico X.21 mantiene activados los circuitos T(transmisión) y R(recepción) durante el intercambio de paquetes.
Supone también que los canales C(control) e I(indicación) de X.21 están activados.
Para funcionar bajo el entorno X.25, LAPB utiliza información(I), Receptor Preparado(RR), Rechazo(REJ), Receptor No Preparado(RNR), Desconexión(DSC), Activar Modo de Respuesta Asíncrono(SARM) y Activar Modo Asíncrono Equilibrado(SABM).
Las respuestas utilizadas son las siguientes: Receptor Preparado(RR), Rechazo(REJ), Receptor No Preparado(RNR), Asentimiento No Numerado(UA), Rechazo de Trama(FRMR) y Desconectar Modo(DM).