Virio Lupo, fue el primer miembro de la gens Viria en alcanzar el consulado (Homo Novus) que se supone que fue como sufecto, alrededor del año 183, bajo Cómodo.
Había servido como cónsul romano previamente y fue gobernador de Britania cuando Severo fue investido emperador en 197.
Severo lo envió a Britania para recuperar la provincia de las rebeliones que la habían asolado.
[2][3] En el norte se vio obligado a comprar la paz con la confederación de las tribus Maeatae, temeroso de que se aliasen con la Confederación Caledonia.
Es posible también que estuviera relacionado con Quinto Virio Egnacio Sulpicio Prisco, cónsul sufecto alrededor del año 215, durante el reinado de Caracalla.